Polidipsia en perros: causas, síntomas y tratamiento

La polidipsia en perros es un problema de salud que se caracteriza por un aumento anormal en la ingesta de agua. Es un síntoma que puede ser indicativo de varios trastornos relacionados que requieren atención veterinaria. Para entender mejor qué es la polidipsia en perros, es fundamental conocer el proceso fisiológico mediante el cual el organismo de los perros maneja la eliminación de desechos a través de la orina.

Qué es la polidipsia en perros y cómo se relaciona con la poliuria

El sistema urinario de los perros está compuesto por los riñones, los uréteres, la vejiga y la uretra. Al igual que en el resto de los mamíferos, tiene la función principal de filtrar la sangre para eliminar desechos y regular el equilibrio de líquidos y electrolitos. Los riñones filtran la sangre para eliminar sustancias tóxicas y residuos del metabolismo celular, transformándolos en orina. Este proceso también es fundamental para regular la cantidad de agua en el cuerpo. Cuando los riñones detectan un exceso de agua en el cuerpo, excretan una mayor cantidad en la orina, y cuando hay una deficiencia, conservan agua reabsorbiéndola en el torrente sanguíneo.

La polidipsia, como hemos visto, se describe como un consumo excesivo de agua. Normalmente, un perro bebe entre 20 y 70 ml de agua por kilogramo de peso corporal al día. Si un perro consume más que esta cantidad, se considera que padece polidipsia.

La polidipsia está directamente relacionada con la poliuria, que es el aumento anormal en la producción de orina, como consecuencia del incremento de la gran ingesta de agua. Un perro con poliuria orina con más frecuencia y en mayor cantidad que lo normal. Por lo tanto, en el ámbito veterinario se suele hablar del síndrome polidipsia-poliuria.

Qué provoca la polidipsia

Este síndrome es un signo clínico común que puede ser síntoma de diferentes enfermedades o condiciones médicas:

• Diabetes mellitus. Los niveles elevados de glucosa en la sangre hacen que los riñones excreten el exceso de glucosa en la orina, lo que arrastra agua y provoca poliuria. Esto, a su vez, lleva a la polidipsia.
• Insuficiencia renal. Los riñones dañados no pueden concentrar la orina adecuadamente, lo que provoca una mayor producción de orina (poliuria) y, como consecuencia, el perro bebe más agua para compensar (polidipsia).
• Síndrome de Cushing (hiperadrenocorticismo). Esta enfermedad también da lugar a problemas de polidipsia y poliuria en perros. Provoca una sobreproducción de cortisol en las glándulas suprarrenales, lo que puede llevar a un aumento en la producción de orina y, por lo tanto, a la necesidad de beber más agua.
• Piómetra. Esta es una infección uterina grave en perras no esterilizadas que puede causar polidipsia y poliuria debido a toxinas en la sangre que afectan la función renal.
• Hipercalcemia. Un nivel elevado de calcio en la sangre puede interferir con la capacidad de los riñones para concentrar la orina, dando lugar síntomas como la poliuria y la polidipsia.
• La polidipsia en perros también tiene otras causas como infecciones, enfermedades hepáticas, deshidratación, efectos secundarios de medicamentos, dietas altas en sal o simplemente un aumento del ejercicio físico.

Cuáles son los síntomas de la polidipsia

Los síntomas de la polidipsia pueden ser variados, pero el signo más evidente es el consumo excesivo de agua. Este comportamiento suele ir acompañado de un aumento en la frecuencia de la micción (poliuria) y otros síntomas. Estos son los signos a los que hay que prestar atención:

Consumo excesivo de agua

El síntoma principal de la polidipsia es que el perro bebe mucha más agua de lo habitual. Aproximadamente más de 100 ml de agua por kilo de peso corporal al día.

Micción frecuente (poliuria)

Debido al aumento en el consumo de agua, el perro también orinará con mayor frecuencia. Podrías notar que pide salir más a menudo o tiene accidentes dentro de la casa.

Cambios en el comportamiento

El perro puede mostrarse más inquieto o ansioso debido a la necesidad constante de beber y orinar.

Aumento de la salivación

Algunos perros pueden mostrar una mayor producción de saliva.

Pérdida de peso

Si la polidipsia es causada por una enfermedad metabólica, como la diabetes, el perro podría perder peso a pesar de tener un buen apetito.

Letargo o fatiga

La deshidratación o la condición médica que esté relacionada con la polidipsia, pueden causar que el perro se sienta más cansado o menos activo de lo habitual.

Si observas estos síntomas, es recomendable llevar al perro al veterinario para una evaluación completa, ya que la polidipsia puede estar asociada a problemas serios que necesitan tratamiento cuanto antes.

Las consecuencias de no tratar la polidipsia a tiempo pueden ser graves. Si no se aborda la causa, el perro puede sufrir deshidratación crónica, desequilibrios electrolíticos y otras complicaciones irreversibles como el fallo renal o hepático. Además, la micción frecuente puede dar lugar a infecciones del tracto urinario debido a la exposición constante de la uretra a bacterias.

Tratamiento de la polidipsia en perros

El diagnóstico de polidipsia en perros comienza con un historial clínico completo y un examen físico realizado por un veterinario. Se pueden realizar diversas pruebas diagnósticas, como análisis de sangre y orina, pruebas de imagen como radiografías o ecografías, y en algunos casos, pruebas hormonales para evaluar la función endocrina. Estos exámenes ayudan a identificar la causa que está provocando la polidipsia para poder determinar el tratamiento más adecuado.

Por lo tanto, la polidipsia en perros tiene tratamiento, pero dependerá de la causa específica en cada perro. Por ejemplo, si el origen es una diabetes mellitus, el tratamiento suele consistir en insulina y cambios en la dieta. En el caso del síndrome de Cushing, se pueden administrar medicamentos que regulen la producción de cortisol. Para la insuficiencia renal crónica, se puede aconsejar un tratamiento de fluidoterapia, dietas especiales y medicamentos para controlar los síntomas. En algunos casos, la polidipsia se puede manejar y controlar con éxito, pero no siempre es curable, especialmente si está relacionada con enfermedades crónicas.

Como ves, la polidipsia en perros es un síntoma que no se debe pasar por alto porque puede tener causas muy diversas, algunas de ellas de cierta gravedad. Si necesitas un veterinario a domicilio puedes contactar con Adiós Mascota. En el caso de que nos encontremos ante una enfermedad fatal, también nos encargamos de todo para hacer que un momento tan duro y difícil, sea lo más amable y dulce posible. Además, te acompañamos en todo el proceso de duelo, si lo necesitas.