Las pulgas son unos desagradables huéspedes de nuestras mascotas. ¿Cómo quitarle las pulgas a un gato?
Estos parásitos externos son unos pequeños insectos planos sin alas que se hospedan en su piel, y pueden resistir hasta seis meses fuera de un hospedador: sus larvas crecen en las zonas húmedas del suelo, y proliferan en entornos cálidos; la ctenocephalides felis es una de las pulgas más comunes en los gatos.
Conviene siempre acudir al veterinario si detectamos que nuestro gato tiene pulgas: es muy importante quitar las pulgas a los gatos y prevenir que las cojan, ya que son vectores de transmisión de enfermedades.
Cómo saber si un gato tiene pulgas
Debemos estar atentos a alteraciones de su comportamiento habitual, por ejemplo, si nos pide que le cepillemos muy a menudo, si no para de rascarse la cabeza o la base de la cola, si está incómodo, con pocas ganas de jugar, o más apático de lo normal.
Se puede comprobar utilizando cepillos antipulgas, ya que tienen las púas muy finas, y es posible ver las liendres, larvas o las mismas pulgas después del cepillado; también podrían apreciarse apartando el pelo del gato y observando su piel.
Un signo casi inequívoco es la aparición de caspa de color negro: los excrementos de las pulgas son de color negro, así que realmente lo que estaremos viendo serán las heces de las pulgas.
Remedios para quitar las pulgas a un gato
¿Cómo quitarle las pulgas a un gato? Ante todo, con mucha paciencia y con estos elementos:
Las pipetas contienen un líquido que mata a las pulgas: se aplica en la zona dorsal, para evitar que el gato se lo quite durante sus lavados.
Los collares antiparasitarios contienen insecticidas que repelen y matan a las pulgas, y lo normal es que su efecto dure unos tres meses.
Las pastillas tienen un efecto de un mes aproximadamente; existen pastillas que duran hasta seis meses, pero no se recomiendan porque pueden resultar agresivas para el sistema digestivo del gato.
Los champús antipulgas sirven de ayuda a los tratamientos anteriores, una vez que el gato ha cogido pulgas.
También hay remedios caseros para las pulgas en gatos, aunque su eficacia no está probada y puede entrañar algún riesgo. Son, por ejemplo, mezclar vinagre o aceites esenciales con el champú antipulgas, rociar al gato con una solución de limón en agua, o aplicarle una infusión de manzanilla impregnando un paño. En cualquier caso, lo mejor es recurrir a tratamientos testados.
Importante: los veterinarios no recomiendan el uso de aceites esenciales en cachorros.
Cómo evitar que los gatos cojan pulgas
- Utilizar los collares, pastillas y pipetas como métodos preventivos.
- Tener en casa plantas de lavanda o citronela, porque su aroma repele a las pulgas, además de mezclarlo con el champú.
- Mantener la casa limpia y desinfectada: aspirar y lavar en lavadora los elementos con los que el gato suele interactuar.
Si el gato tiene pulgas, se sentirá incómodo y su salud podría estar en peligro, así que si notas que su comportamiento ha cambiado, acude inmediatamente al veterinario. Manteniendo un entorno higiénico y siguiendo las instrucciones de un veterinario, podremos ayudarle a evitar este problema.