Aunque la frecuencia varía entre individuos, los perros también tienen hipo, un fenómeno común en ellos, al igual que en los humanos. Nuestros amigos peludos comparten varios comportamientos con nosotros, como el hipo, los bostezos, los estornudos y los movimientos durante el sueño, todos causados por razones similares.
Si tu perro suele tener hipo, es natural que te preguntes hasta qué punto es normal y en qué momento motivo de preocupación. Por eso, queremos darte información sobre las posibles causas del hipo en perros.
Qué provoca el hipo en los perros
El hipo es el resultado de espasmos involuntarios del diafragma, el músculo que separa el tórax del abdomen y que juega un papel crucial en la respiración. Durante estos espasmos, las cuerdas vocales se cierran brevemente, lo que produce el característico sonido de hipo. En la mayoría de los casos, no es grave y tiende a desaparecer por sí solo al cabo de unos minutos.
Pero ¿a qué se debe el hipo en los perros? Existen diferentes causas que lo provocan.
Comer o beber con ansia
Comer o beber agua con demasiada rapidez es la causa más habitual del hipo en perros (y también en humanos). Cuando un perro ingiere comida o agua rápidamente, también traga aire en exceso, y esto puede provocar hipo o flatulencias durante la digestión.
Muchos perros muestran ansiedad al comer, pero este comportamiento se puede corregir con paciencia y entrenamiento. Es importante enseñar al perro a controlarse en presencia de comida y además, es buena idea dividir sus comidas en porciones más pequeñas. Esto puede ayudar a reducir su nivel de ansiedad porque no tiene una sensación de hambre tan intensa. También se puede recurrir a un comedero especial antivoracidad que le obliga a comer más despacio.
Alergias o intoxicación
El hipo en los perros también puede estar relacionado con problemas digestivos, como alergias alimentarias, ingestión de alimentos tóxicos o digestiones pesadas. En casos como estos, el hipo puede estar acompañado de otros síntomas que indicarían que estamos ante un problema más serio.
Si tu perro tiene hipo con frecuencia y además presenta vómitos recurrentes de comida o bilis, es recomendable llevarlo al veterinario para una evaluación cuanto antes.
Los cachorros y los perros de caza son más propensos al hipo debido a problemas digestivos. En cachorros, esto puede deberse a la sensibilidad de su sistema digestivo en crecimiento, especialmente al cambiar su dieta. Los perros de caza, por otro lado, pueden tener una predisposición a problemas digestivos que se manifiestan a través del hipo, aunque dependerá mucho de la raza. En cualquier caso, un veterinario podrá identificar la causa del hipo y recomendar el tratamiento adecuado.
Frío y causas emocionales
El hipo en los perros también puede estar desencadenado por situaciones como el frío, los nervios, la ansiedad, el estrés o el miedo. A veces, está acompañado de flatulencias.
Aunque resulte sorprendente, las bajas temperaturas pueden provocar hipo en los perros, especialmente en cachorros y razas pequeñas. Para confirmar si el frío es la causa, es importante observar si se presentan otros síntomas como temblores.
En el caso de que esté asustado o sobreexcitado, lo principal es entender la razón detrás de su comportamiento y qué es lo que está provocando esta reacción emocional. ¿Se le está estimulando en exceso con juegos bruscos? ¿Ha habido algún ruido repentino que le ha podido afectar? Identificar la causa y resolverla ayudará a que el hipo desaparezca gradualmente.
¿Debería preocuparme si mi perro tiene hipo?
¿Es malo el hipo en los perros? En la mayoría de los casos es inofensivo y desaparecerá por sí solo en unos minutos. Si el hipo ocurre con frecuencia, dura más de 60 minutos o está acompañado de otros síntomas como tos, estornudos, respiración fuerte o estornudos inversos, es importante estar alerta, ya que podría indicar un problema más serio.
Los síntomas graves como intolerancia al ejercicio, respiración fuerte y ataques repetidos de hipo podrían estar asociados con enfermedades de cierta gravedad tales como la neumonía, pericarditis, asma u otras patologías respiratorias. En estos casos, es fundamental llevar al perro al veterinario para que se le realicen las pruebas necesarias para obtener un diagnóstico.
Cómo quitar el hipo en perros
¿Cómo quitar el hipo en perros? No recurras nunca al famoso susto, porque el perro podría tener una mala reacción debido al sobresalto. Existen otras formas más amables de ayudarle. Estos son algunos métodos que podrías probar para intentar quitarle el hipo a un perro:
Distraerlo con juegos o juguetes
Los juegos y juguetes son una excelente manera de distraer al perro y cambiar su punto de atención. Cambiar de actividad puede provocar un cambio en su respiración y ayudar a detener el hipo. Puedes jugar a lanzarle una pelota, darle un juguete interactivo o simplemente jugar con él para mantenerlo ocupado y distraído.
Ofrecerle comida o agua
Darle un poco de comida o agua puede ser efectivo para cambiar el patrón de respiración del perro. El acto de tragar la comida o el agua puede interrumpir el hipo y hacer que desaparezca.
Sacarlo a pasear
El ejercicio y la actividad física pueden cambiar la forma en que el perro respira. Sacarlo a pasear o hacer alguna actividad al aire libre puede distraerlo y provocar un cambio en su respiración, lo que puede ayudar a detener el hipo.
Darle un baño
Para algunos perros, el baño puede ser una experiencia relajante y entretenida. El agua y la sensación de estar en la bañera pueden cambiar su patrón respiratorio y contribuir a detener el hipo.
Abrigarlo
Si el hipo se debe al frío, abrigar al perro con una manta o llevarlo a un lugar más cálido puede elevar su temperatura corporal y hacer que el hipo desaparezca.
El hipo en perros, por lo tanto, puede ser una reacción totalmente inofensiva y normal. Pero si ocurre de forma muy constante, es recomendable indagar en la causa, ya que puede ser síntoma de algo más serio.
Con los mejores cuidados, podrás darle a tu perro una vida larga y llena de felicidad. Cuando llegue el momento de la inevitable despedida, puedes acudir a Adiós Mascota para que te ayudemos con todo el proceso y puedas vivir un duelo lo más sereno posible.