Síntomas para prevenir la muerte de gatos por infarto

La muerte de gatos por infarto no es algo muy común, pero es posible que suceda como consecuencia de una arritmia, una cardiomiopatía (anomalías en las paredes del corazón) o un coágulo en la arteria aorta. Vamos a ver cómo identificar un ataque al corazón en un gato y qué medidas preventivas puedes tomar para evitar que tu amigo felino sufra estas dolencias.

Síntomas de infarto en gatos

Dado que el infarto en gatos implica un bombeo insuficiente de sangre, sus organismos tratarán de compensar esta falta de irrigación para que el torrente sanguíneo llegue a todos sus tejidos.

Sin embargo, el pronóstico normal de estas situaciones es la acumulación de líquido en los pulmones, en la cavidad torácica, el abdomen o el pericardio. Si bien estos dos últimos casos no suelen suponer peligro para la vida del gato, el líquido acumulado en tórax o pulmones ocasionará graves dificultades respiratorias.

Por consiguiente, tu gato respirará más rápido para compensar la sensación de falta de aire, con movimientos abdominales más violentos de lo normal, y normalmente con la boca abierta, el cuello estirado y la lengua azul (cianosis).

Además, será muy probable que pierda el apetito y se muestre permanentemente fatigado: las patas se le paralizarán y entrará en un estado de letargo. En última instancia, el ataque al corazón en un gato acaba causando la muerte por asfixia.

Debes en tener en cuenta que todos estos síntomas del infarto en gatos no se manifiestan hasta que la insuficiencia cardiaca está en fase avanzada, por lo que no se puede hacer una detección temprana atendiendo a los síntomas visibles salvo que sepamos de antemano que nuestro gato es propenso a sufrir estas dolencias.

Cómo prevenir la muerte de gatos por infarto

Controlar su ritmo respiratorio

Los gatos sanos no deberían realizar en reposo más de 30 respiraciones por minuto. Si esta frecuencia aumentase, es posible que tu gato esté en la antesala de un infarto.

Si a esta aceleración le acompaña alguno de los signos descritos anteriormente, deberás acudir al veterinario para que le haga las pruebas pertinentes en busca de posibles soplos o arritmias.

Suministrar anticoagulantes

Las enfermedades cardiacas en gatos suelen propiciar la aparición de trombos (coágulos de sangre) dentro del corazón; cuando estos se desprenden, viajan por el torrente sanguíneo con el consiguiente riesgo de obstrucción arterial.

El veterinario será quien mejor determine qué fármacos anticoagulantes serán los mejores para tu gato, de cara a disolver el trombo y evitar males mayores.

Eliminar el líquido acumulado

Dado que las insuficiencias cardiacas suelen ir precedidas de acumulaciones de líquidos, será muy conveniente que el veterinario inyecte diuréticos para expulsarlos y limpiar su organismo.

Este tratamiento, como te puedes imaginar, solo lo podrá pautar el veterinario una vez haya determinado el alcance de la lesión cardiaca de tu gato.

Es muy difícil evitar la muerte de gatos por infarto si el veterinario no ha podido determinar cómo de grave es su lesión cardiaca. A partir de ahí, todos los tratamientos irán destinados a postergar el desenlace y a dar la mejor calidad de vida posible al gato. En Adiós Mascota, conscientes de esta situación, ponemos a tu disposición toda nuestra experiencia y atención para que puedas despedirte de tu amigo felino de la mejor manera posible.